sábado, 30 de octubre de 2010

Una exposición de miedo

Sé que muchos no habéis podido acudir a la cita del Salón del Manga de este año. No por falta de ganas, sino porque ese pequeño detalle que forma parte de nuestras vidas que se llama "trabajo" no os ha dado la oportunidad, o porque ese otro al que muchos llaman economía, no os lo ha permitido. Con el ánimo de que os sintáis más cerca del Salón (y por qué no decirlo en parte debido a las peticiones de algunos amigos), os intentaré hacer un pequeño viaje por el anecdotario del Salón. Eso sí, si el tiempo lo permite y el sueño me deja despertarme por la manaña...

Empezaré por la Exposición Manga de Miedo, que se encuentra situada en la planta superior del edificio de La Farga. La muestra, convertida en la exposición central del Salón, repasa la tradición visual japonesa del mundo del terror, dando un peso específico al manga, pero sin olvidarse de otras manifestaciones, como la tradición pictórica, el anime o el cine de terror japonés, que vivió una ola a raíz de la cinta The Ring (Hideo Nakata, 1998), y que llevó a la creación del proyecto J-Horror Theater.

El panel central (el que véis en la fotografía) está dedicado al apartado cinematográfico y está dividido en dos partes: La primera hace un recorrido por el ideario de terror japonés. Analiza las siguientes películas: Kwaidan, Godzilla, The Ring, Cure, Dark Water, LLamada Perdida, La Gran Guerra Yokai. Os dejo con el texto introductorio:

"Japón es uno de los países del mundo con más tradición por las leyendas mitológicas, sobretodo, las protagonizadas por dioses y demonios, de la misma forma que siempre ha sido un país rico en cuentos de fantasmas. Precisamente, la industria cinematográfica japonesa siempre ha considerado que, una buena integración de su folklore en su cine, ha servido para fomentar su cultura. Por esta razón, uno de los pilares culturales más susceptibles de polémica, pero que más han triunfado en nuestro país, ha sido el cine de terror japonés, sobre todo a partir del fenómeno The Ring (1998). En esta sección repasamos algunas de las producciones japonesas de terror más importantes y más famosas de su extensa cinematografía dentro del género."

Y la segunda parte, la que analiza en profundidad una de las figuras más destacadas dentro del ámbito del terror nipón, está dedicada al invitado "ausente" de esta edición: Takashi Shimizu. Parece que la maldición que le persigue desde los inicios de su carrera, ha provocado su ausencia "in  extremis" en el Salón del Manga. El texto que puede leerse a modo de introducción es el siguiente:

"Takashi Shimizu, tras iniciarse en el mundo del cortometraje fue descubierto por Kiyoshi Kurosawa (Cure) y el guionista de The Ring, Hiroshi Takashi. A parte de las diferentes versiones de Ju-on (la saga conocida como La Maldición) que ha realizado para el cine y vídeo, Shimizu tiene en su haber, entre otras, Tomie Re-Birth, Marebito (distribuida en España con el título Seres Extraños) y The Shock Labyrinth 3D, presentada, esta última, en el pasado Festival de Sitges".

Tres pantallas (una dedicada al mundo del cine de terror, otra al anime, y una tercera a las películas de Takashi Simizu) se encargan de reproduccir contínuamente un montaje audiovisual que está acompañado por una selección musical (obra del gran conocedor de la cultura nipona, Eduard Terrades Vicens, que junto a Marc Bernabé han comisariado la exposición), y que recoge fragmentos de La Maldición primera y segunda partes, Dark Water, The Ring, Death Note, además de la cacofonía de Kayako para La Maldición.

Me dejo varias partes de la exposición, soy consciente (la dedicada a Hideashi Hino, a la exposición de originales de mangas de terror, al área invadida por los Yokais, etc). Pero lo hago con ese propósito. Para que algunos de los que aún no han acudido al Salón se decidan a hacerlo...

Pasaréis un rato de miedo.

viernes, 29 de octubre de 2010

Una nueva edición del Salón del Manga llega a Barcelona

El Salón del Manga está a punto de comenzar. Tan sólo quedan unas horas para que el aficionado pueda acudir, un año más, a su cita con la muestra otaku más importante de toda España.

Pero antes de eso... mucho antes de que el aficionado entre en La Farga de L'Hospitalet y descubra los stands, y las exposiciones, y la sala de videojuegos, se pasa por una fase previa: la del día antes de la inauguración, donde por arte de magia lo que tan solo son un conjunto de paredes y un gran espacio vacío, se convierte en un mundo fantástico. Una jornada de locura colectiva donde las furgonetas descargan material, los invitados van llegando al aeropuerto de Barcelona (ayer mismo llegaba la autora de manga Kayono, a la que se dedica una exposición, o el célebre blogger Kirai), las exposiciones van cobrando vida (os aconsejo que no os perdáis la exposición Manga de Miedo, que ayer se encontraba en plena fase de montaje, por su modo didáctico de introducirnos en el mundo del terror japonés). Y los stands empiezan a cobrar vida.

Así era el stand de CineAsia (nº 142, englobado dentro del área de Japón, junto a Casa Asia, el Consulado General de Japón y la Fundación Japón) a eso de las 8 y media de la noche. 20th Century Boys acababa de desplegar sus velas en esta edición, junto a El Bueno, El Malo, y El Raro, The Chaser, Ip Man, Air Doll, Crows y un largo etcétera de películas que os esperan desde hoy, viernes 29 de Octubre, en la Farga de L'Hospitalet en Barcelona.

Bienvenidos a las XVI edición del Salón del Manga de Barcelona.

Para más información: Ficomic

miércoles, 27 de octubre de 2010

Arranca con éxito la III Muestra de cine de Corea

Ayer martes día 26 de octubre arrancó en Madrid con un lleno total de público la III Muestra de cine coreano en España en la Filmoteca. A la inauguración acudió el embajador de Corea del Sur, Cho Taeyul, que manifestó su alegría por la difusión del cine coreano a nivel internacional, y su buena salud en España. Además de expresar su agradecimiento a la Filmoteca de Madrid por acoger esta muestra, englobada dentro de los actos realizados por la Embajada en la celebración del 60 aniversario de la instauración de relaciones diplomáticas entre España y Corea del Sur.

La película elegida para inaugurar la muestra ha sido Dream de Kim Ki-duk. Hay que recordar que el realizador coreano ha sido uno de los responsables de la penetración del cine coreano en España, tras el pase de La Isla en el Festival de cine de Sitges en el año 2000. Un Kim Ki-duk que acudió a Sitges, tras el pase de su película en Venecia, y donde dejó muestras de su particular modo de entender el cine: “No vi muchas películas antes de convertirme en realizador, en Corea no iba al cine y en Francia vi tres: Les Amants du Pont-Neuf de Carax, El Amante de Annaud y El Silencio de los Corderos de Demme. Cuando regresé a Corea, vi muy pocas películas coreanas, y ninguna me conmovió. Pero cuando me convertí en realizador, vi algunas como Greenfish o Peppermint Candy de Lee Chang-dong, un cineasta que me gusta mucho”.


La historia de Dream está basada en un sueño que tuvo el director hace dos años, en el que sufría un accidente de coche que él había provocado.  Con esa extraña sensación se acordó de la anécdota de un filósofo chino llamado Zhuangzi (369-290 a.C. **) y  ésa fue la base de la historia:

Un día en un sueño, yo era una mariposa. Volaba elegantemente… Disfrutaba tanto volando de flor en flor que me olvidé  de quién era. Me desperté y me di cuenta de que era yo mismo. Pero ya no podía saber si en mi sueño me convertí en una mariposa o la mariposa se convirtió en Zhuangzi en su sueño. Está claro que entre Zhuangzi y la mariposa no existía relación alguna. En este mundo tan inestable y temporal, un sueño puede ser realidad y viceversa.

Recordar que Dream está distribuida en España por Mediatres Estudio y el dvd comercializado por Warner Bros. dentro de la colección Winds of Asia. Para más información: Mediatres

martes, 26 de octubre de 2010

Takashi Shimizu no estará presente en el Salón del Manga

Barcelona, Casa Asia, Martes 26 de Ocubre de 2010

Con la presencia de Menene Gras (directora de Cultura y Exposiciones de Casa Asia), Carles Santamaría (director del Salón del Manga), Antoni Comas (Presidente del Gremi d'Editors de Catalunya) e Hidehiro Tsubaki (cónsul General de Japón en Barcelona), ha tenido lugar esta mañana a las 12 de la mañana la rueda de prensa de presentación de la XVI edición del Salón del Manga de Barcelona.

La inesperada ausencia del director de cine Takashi Shimizu, que finalmente no podrá acudir a la cita con el Salón del Manga por problemas de agenda (en breve inicia un nuevo rodaje), ha sido el único punto negativo de toda la rueda de prensa. El director nipón se ha disculpado ante la organización del Salón y se ha brindado para venir en una próxima edición. De esta forma, el programa de proyecciones de films de terror que acompañarán a la Exposición Manga de Miedo, quedará de la siguiente manera:

-Viernes 29 de Octubre: 18:45. Cine de Terror Japonés
(No recomendado para menores de 13 años)
Dark Water (Hideo Nakata, V.O.S.E) 
-Lunes 1 de Noviembre: 18:05 Cine de Terror Japonés
(No recomendada a menores de 7 años)
Cure (Kiyoshi Kurosawa, V.O.S.E). Sorteo de Películas y Pósters por Mediatres

El cónsul General de Japón en Barcelona, Hidehiro Tsubaki, ha destacado su afición al manga, en el que es su primer acto oficial. "Una tradición que he mantenido desde adolescente, a lo largo de mi etapa en la Universidad, y la continúo hoy en día". Por otra parte ha recordado el premio que este año ha otorgado el Ministerio de Asuntos exteriores de Japón a Ficomic (un premio que será escenificado durante el Saón del Manga), por su labor en la promoción de la cultura japonesa.

Uno de los puntos fuertes del Salón será la exposición Manga de Miedo, que repasa la tradición visual japonesa del mundo del terror, dando un peso específico al manga, pero sin olvidarse de otras manifestaciones, como la tradición pictórica, el anime o el horror japonés en el cine. Estará dividida en tres apartados temáticos (anime-manga de terror, cine de terror japonés y Takashi Shimizu), y contará con tres montajes audiovisuales que recogen lo mejor de estas producciones. La exposición se podrá ver durante los cuatro días del Salón en el recinto de La Farga.

Por otra parte confirmar el resto de invitados presentes en el Salón: desde Hideshi Hino, uno de los autores de referencia del manga de terror, a Kenji Kamiyama, director y guionista de la serie Ghost in the Shell: Stand Alone Complex (2002) y su secuela Ghost in the Shell: S.A.C 2ng Gig. (2004), la cantante japonesa Yuuki, joven solista y compositora, que empezó su carrera profesional en el año 2004, o el guru del mundo de los videojuegos Peter Molyneux, entre otros.

Para más información: Ficomic

viernes, 22 de octubre de 2010

Jose Luis Rebordinos se despide de la Semana de Terror de San Sebastián

La XXI Semana de cine Fantástico y de Terror de San Sebastián tiene un carácter especial ya que significa la despedida de su director y alma mater, José Luis Rebordinos. Muchos somos los que conocemos y admiramos la carrera de este amante del cine que ha sabido darle un aire tan especial a la muestra donostiarra.

La presente edición, que dará inicio el próximo sábado 30 de Octubre con la proyección de la película ganadora en el Festival de Sitges, Rare Exports, presenta tres films asiáticos en su programación: Bedevilled (la cinta coreana triunfadora en su proyección del cine Retiro en Sitges 2010), la impactante y perturbadora Dream Home, del hongkonés Pang Ho-cheung, y el film de animación Welcome to the Space Show.


Desde CineAsia queremos desearle todo lo mejor a Jose Luis Rebordinos en su nuevo cargo al frente del Festival de cine de San Sebastián.


Para más información: Semana de cine Fantástico y de Terror

jueves, 21 de octubre de 2010

La trilogía 20th Century Boys en el stand de CineAsia en el Salón del Manga

El próximo 26 de Octubre saldrá a la venta en DVD en nuestro pais 20th Century Boys, la exitosa trilogía basada en el manga homónimo y que ha batido todos los récords de taquilla en Japón. 20th Century Boys se lanza en nuestro país en un pack especial que incluye las 3 películas que componen la saga y una edición de la Guía Oficial (“20th Century Boys”: El Libro de los Secretos) con introducción exclusiva de Ángel Sala, director del Sitges Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya. Además, la trilogía estará también disponible en alquiler en las plataformas digitales Imagenio y ONO, y en los videoclubs virtuales de las videoconsolas Playstation 3 y Xbox 360.

Durante la celebración del Salón del Manga de Barcelona (del viernes 29 de Octubre, al lunes 1 de Noviembre) puedes conseguir el pack de 20th Century Boys, con el regalo de un póster promocional de la trilogía, acudiendo al stand de CineAsia (nº142).


20th Century Boys se convirtió desde que salió a la venta en el año 2000 en uno de los más importantes e influyentes mangas de la historia de Japón, debido en gran parte a la complejidad de su trama, el gran número de personajes, la madurez de su relato, y la extensión de la historia que narraba: los primeros episodios empiezan a finales de los años 60 y la historia termina en los años 20 del siglo XXI. Este éxito del manga ha tenido su continuidad en las adaptaciones cinematográficas: las tres partes de la trilogía lograron alcanzar el primer puesto en la taquilla japonesa, recaudando un total de más de 90 millones de dólares, números que en Japón están al alcance de pocas películas.

Distribuida en España por Mediatres Estudio, 20th Century Boys es comercializada por Warner Bros. Entertainment España. Desde el pasado 28 de septiembre las 3 películas que componen la trilogía ya se encuentran disponibles en alquiler en videoclubs.

Para más información: Mediatres Estudio

III Muestra de cine coreano en España


Madrid, del 26 de Octubre al 7 de Noviembre.

La Embajada de la República de Corea en Madrid, celebra por tercer año consecutivo la III Muestra de Cine Coreano en España después del éxito de la primera edición que tuvo lugar en Barcelona en el año 2008 con la colaboración del KOFIC (Korean Film Council) y la segunda en Madrid y Barcelona en el año 2009. La idea de comenzar a organizar estas muestras surgió motivada por el deseo de mostrar los diferentes aspectos del cine coreano. Desde el año 2008, la muestra se desarrolla de forma anual.

La Embajada de la República de Corea y la Filmoteca Española han organizado este año la Tercera Muestra de Cine Coreano. Una actividad que se celebra en el marco del 60º aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre España y Corea. El número 60 ostenta tanto en Corea como en otros países de Asia un significado especial, ya que es el número que simboliza el comienzo de un nuevo ciclo. A través de esta actividad se pretende aprovechar esta oportunidad para introducir el cine coreano en España y aumentar el intercambio cultural entre ambos países. Corea se ha ganado el reconocimiento internacional por su poderosa cinematografía. Muchas de las películas coreanas, así como sus directores y actores han sido galardonadas en diferentes festivales internacionales de cine tales como, Cannes, Berlín, Venecia o San Sebastián durante los últimos diez años. Gracias a estos festivales especializados, a la llegada a las salas comerciales y al mercado de DVD nacional de films procedentes de Corea del Sur, el público ha empezado a conocer un poco más acerca de esta cinematografía.

Siete son las recientes y novedosas películas que integran la III Muestra de Cine Coreano, y que se proyectarán en versión original y subtitulada en castellano, en el cine Doré a lo largo de la última semana de octubre y la primera de noviembre. 

La película Dream, (distribuida en España por la empresa Mediatres Estudio) el último y más duro trabajo del famoso cineasta Kim Ki-duk inaugura el martes, 26 de octubre, la III Muestra de Cine Coreano. Este año contaremos con la presencia del aclamado director Lee Yoon-ki, con su cuarta y más reciente obra, My Dear Enemy del año 2008. También tendremos la oportunidad de disfrutar de The Chaser (2008), distribuida en España por la empresa Versus Enterteinment, dirigida por Na Hong-jin, el thriller coreano con el mayor éxito de taquilla de la historia de Corea y una de las películas más  taquilleras de la historia de Corea. Fue Premio Orient Express a la mejor producción asiática en el 41 Festival de Sitges. Beyond the Years es la película número 100 del maestro Im Kwon-taek, un director reconocido en su país y a nivel internacional que siempre ha mostrado los valores  tradicionales coreanos en sus películas. Con su largometraje número 98, Ebrio de Mujeres y de Pintura, ganó el premio al Mejor Director en el Festival de Cannes del año 2002. La película Speed Scandal del director Kang Hyeong-cheol, desde su estreno en el año 2009 se ha convertido en una de las películas más taquilleras en Corea. En ella participa el popular cómico coreano Cha Tae-Hyun, al que el aficionado recordará por su magnífica interpretación en My Sassy Girl. También disfrutaremos con la película My Friend and his Wife del director Shin dong-il y por último, la Muestra se clausurará con la comedia Happy Life, del director Jun-ik Lee.

El miércoles 27 de octubre, tras la proyección de la película My Dear Enemy, habrá un coloquio en la misma sala del cine con el director invitado este año: Lee Yoon-ki, en la que participarán críticos cinematográficos, distribuidoras españolas. Tendremos tiempo para charlar con el director acerca de su película y con él también podremos debatir sobre la actualidad del cine coreano y su éxito.
Organizador: La Embajada de la República de Corea, en colaboración con la Filmoteca Española.

Fecha de inicio  26/10/2010 
Fecha de finalización  07/11/2010

Lugar: Cine Doré (Santa Isabel n.º 3. 28012 Madrid).
Estaciones de Metro más cercanas: Antón Martín, Tirso de Molina y Lavapiés.
Líneas de autobuses próximas: 6, 26, 32 y 57.

Precio  2,50 € la sesión (Las películas se proyectarán en su versión original con subtítulos en castellano)

Para más información: Cine Dore

martes, 19 de octubre de 2010

Japan Madness: una maratón inolvidable

De nuestros colaboradores y amigos "El Pozo de Sadako"

La maratón nocturna "Japan Madness" de este año era la carta de presentación en nuestro país del nuevo subsello de la Nikkatsu (del que no paramos de hablar), Sushi Typhoon, especializado en peliculas de género con bajo presupuesto, con tres de sus primeras películas, Alien vs Ninja, Mutant Girls Squad y la esperada Helldriver de Yoshihiro Nishimura. Se prometía una noche llena de litros de sangre, miembros cercenados y humor negrísimo, y eso fue exactamente lo que tuvimos.

Después de una descacharrante presentación por parte de Nishimura, con su habitual fundoshi (el "pañal" del sumo) y un bebé de goma, cordón umbilical incluido, al que daba vueltas por los aires como un cowboy a su lazo, comenzamos con su nueva película, Helldriver. Tras Tokyo Gore Police, seguramente la mejor película de esta nueva hornada de gore bizarro japonés, por tener un trasfondo muy interesante además del imprescindible baño de sangre, no se podía comenzar la maratón de mejor manera que con el segundo film del director nipón. Como proyecto sigue la línea de Tokyo Gore Police de unir gore, efectos visuales con creaciones bizarras, y critica social, pero el problema es que esta vez no ha dedicado tanto tiempo a desarrollar el personaje principal, con lo que todo va tan rápido que queda un poco deslavazado. Sin duda es un buen film, tanto para los sedientos de sangre y efectos, como para los que buscan algo más allá de todo eso, pero por desgracia no llega al nivel de la opera prima de Nishimura.

Mucho más ligera es Mutant Girls Squad, dirigida a seis manos por el propio Nishimura, Tak Sakaguchi (protagonista de Battlefield Baseball) y Noboru Iguchi (Machine Girl), una comedia sangrienta que parece preguntarse "¿y si los X-Men lo formaran chicas como Machine Girl?".  Así tenemos a la chica con tentáculos por brazos, a la que le salen katanas por sus pechos, y, no podía faltar, a la que le aparece una sierra mecánica por su culo. No es precisamente la Patrullosa de Claremont, pero si que da pie a un montón de momentos muy divertidos para los fans de la comedia de acción-gore a la que nos tienen acostumbrados Iguchi & Co. Aquí lógicamente se nota tanto la mano de Nishimura, con sus efectos y sus "lluvias de sangre", como la de Iguchi, con todos esos chistes sexuales y las escenas de instituto. Es de suponer que Takaguchi, que también dirige una parte, además de dar vida al anteriormente mencionado "iluminado" lider del clan mutante, se habrá encargado especialmente de su especialidad, las escenas de acción. Esta Mutant Girls Squad ni tiene fondo social, ni falta que le hace; es pura diversión sin rodeos.


La tercera de la noche, y la más floja de largo, es Alien VS Ninja, dirigida por Seiji Chiba, que tiene el dudoso honor de ser el guionista de Death Trance, otra catástrofe fílmica de altura. La premisa es más o menos atractiva para un film de acción de serie B: un puñado de ninjas se topan con un meteorito recién caído, que por casualidad porta un puñado de alienígenas mezcla de velociraptores y la criatura de Alien (aunque más bien parece el morro de un delfín), que les irán persiguiendo por el bosque a la vez que evitan al clan de ninjas rival.

Aun así, esta fue una de esas noches para recordar (y van...) en el Cine Retiro. Seguro que para el año que viene este puñado de descerebrados nos tendrán listas unas cuantas películas más, con las que espero poder repetir.

Podéis leer la reseña completa en El Pozo de Sadako

Sitges 2010 día 10: Sábado 16 de Octubre

Hace tres días que Sitges 2010 clausuró su edición. Sé que muchas veces la información busca la inmediatez del momento... pero no me resisto a comentaros los últimos momentos que vivimos en el festival.

Desde la loca carrera por las calles de Sitges a fin de encontrar un asiento para la proyección de I Saw the Devil en la sesión matinal del cine Retiro, a las despedidas en el stand de CineAsia, pasando por la sorpresa que supuso la proyección de uno de los films más tapados del festival, Bedevilled...

Nos es fácil quedarse con una imagen del festival, y desde luego no voy a ser yo el que vaya a hacerlo.

Me quedo con la gente con la que hemos compartido nuestra pasión por Asia (con los que han tenido la suerte de desplazarse hasta Sitges, pero también con tantos otros que no han podido venir, y con los que hemos charlado a través del twitter, del blog, o a través del correo electrónico). Me quedo con los directores asiáticos a los que hemos conocido (Apitchapong, Nishimura, Nakashima, Im Sang-soo, etc...), o con los que nos hemos reencontrado (el coreano Kim Jee-woon). Me quedo con las sesiones de cine, con los aplausos de un público entregado nada más apagarse las luces de la sala.

Eso es Sitges. ¿Los premios? Eso es cosa del jurado. Eso sí, un aplauso para los que han otorgado el Premio Casa Asia a la película Cold Fish de Sion Sono. El cine asiático está de enhorabuena.

Nos vemos dentro de 363 días en Sitges 2011.

Ciclo de cine Afgano: "Cines de Afganistán: relatos de género y sociedad"

Casa Asia Barcelona. Del 19 al 21 de Octubre

Casa Asia presenta el primer ciclo de cine afgano coincidiendo con la exposición que ha producido sobre Afganistán que inaugurará próximamente en su sede. Este programa de cine documental contribuye al conocimiento de la vida cotidiana de un país en conflicto, del que a menudo sólo nos llegan noticias desde los medios de comunicación.

En la breve historia del cine afgano, las mujeres se situaron por primera vez detrás de la cámara a partir del año 2001. La obra cinematográfica resultante es políticamente consciente, en tanto que refleja, desde una mirada crítica y constructiva, la situación presente de la mujer en la sociedad afgana comprometiéndose con su destino. La programación que se presenta yuxtapone el tema «mujeres en Afganistán» a las iniciativas promovidas por realizadoras, actrices y organizaciones de mujeres en Kabul, cuyo trabajo político se inició en el periodo pretalibán y ha seguido desarrollándose desde el exilio hasta hoy. Las diferentes perspectivas internas o externas constituyen a su vez un do cumento y un testimonio de excepción sobre la producción de género, la migración y sus representaciones, en una sociedad que vive conflictivamente el paso de la tradición a la modernidad.

Lugar: Casa Asia Barcelona (Av. Diagonal, 373). Entrada libre hasta agotar el aforo.

Para más información: Casa Asia

The Storm Warriors - Especial Semana de cine Hong Kong

De nuestro colaborador Eduard Terrades Vicens

Hay tebeos que nunca deberían adaptarse a imagen real, pues la magia que los caracteriza se rompe al dotarlos de movimiento. Le pasó a Devilman, la multimillonaria recreación cinematográfica que se hizo del célebre personaje concebido por Go Nagai; o a Dragon Ball, cuya versión americana en imagen real directamente deprimió a los fans de la serie. Ahora es el turno de Fung Wan, una de las obras más conocidas y apreciadas del dibujante Wing-Shing Ma y que se viene publicando en Hong Kong desde el año 1989. Este longevo manhua, que cuenta con 18 tomos en su haber, ya había sido adaptado en cine en 1998 por Andrew Lau bajo el nombre de The Storm Riders. Los Pang Brothers ahora han reciclado una de las sagas del cómic original para ofrecer una secuela de la versión de Lau. Pero si en aquella ocasión los personajes de Nube y Viento venían secundados por una serie de personajes con cierta idiosincrasia dentro de la película y avalados por un guión que además de delimitar su origen, se mantenía firme a la hora de exponer las aventuras en las que se veían envueltos, en esta versión mega posmodernizada la historia queda reducida a la nada. A los Pang Brothers les encanta envolver sus producciones con secuencias espectaculares y puramente esteticistas, pero la extensa sobresaturación visual convierte a The Storm Warriors en un producto vacío de contenido. Lo estético se come la historia, pero cuando esa visualidad escénica es tan reiterativa, termina por extasiar al espectador, que asiste al combate más longevo de su vida en unos veinte minutos finales exasperantes a cámara lenta. Además, para los espectadores que no conozcan la historia de los dos héroes, las pasarán canutas al comprobar que la cinta se abre sin presentación alguna, y en plena mitad de un combate contra un poderoso líder japonés que amenaza la vida de los dos luchadores y del emperador chino. Nube y Viento quedarán malheridos de este enfrentamiento y buscarán entrenarse para combatir a este demonio japonés, ayudadas por un par de féminas que no pintan nada y un viejo maestro. La única novedad es ver como uno de los dos superhéroes (y no diremos cual porque es el único spoiler que vale la pena guardarse) se pasa al bando enemigo al practicar artes marciales con espíritus del inframundo. 

La gracia precisamente del cómic original era ver como los dos espadachines adquieren sus poderes, luchan para una serie de propósitos, se enamoran, etc. Distan mucho de la frialdad que demuestran en esta versión. Al menos Eking Cheng y Aaron Kwok repiten sus respectivos roles de Nube y Viento, y a pesar de su pose cool impuesta por los dos cineastas gemelos, salvan la papeleta ofreciendo una limitadas pero buenas actuaciones.

Toda una lástima que se haya mimado más a los impresionantes efectos visuales, que en algunos momentos recuerdan a los utilizados en 300 de Zack Snyder (la textura de la fotografía en las batallas o los saltos al ralenti en los combates de uno a uno), y no a la historia propiamente dicha, pues si algo caracteriza los comics originales es su condición de pertenecer al género de aventuras siguiendo los principios de las historias wuxia. Y la cinta de los Pang Brothers se olvida completamente del espíritu del esas novelas y comics pulp repletos de luchadores con espada que tienen poderes y viven un sinfín de aventuras. Eso si, la espectacularidad de algunas secuencias invitan a verla en pantalla grande, ya que combinadas con la poderosa banda sonora, gana muchísimo como blockbuster que pretende entretener y sorprender. La pregunta final es… ¿Por qué no se rodó en 3D? Tal vez la respuesta la obtengamos cuando rueden la tercera parte, que ya cuenta con preproducción para el próximo año.

Higanjima: los vampiros adolescentes coreanos

De nuestro colaborador Jordi Codó
Catalogada como ‘terror’, Higanjima es más bien un juvenil refrito de géneros y referencias varias, que más que asustar pretende excitar a la audiencia a base de artes marciales, sangre a borbotones, humor zafio y algo de drama adolescente. No hay duda de que viene a sumarse a la locura internacional por los vampiros, aportando su peculiaridad cultural a un tema muy tratado, pero menos visto en ropajes tradicionales japoneses. Avispada suma, pues, de exotismo de masas y high-tech de tendencias, el film se justifica ante todo a través del estilo, el del manga original, acaso, o el de su máximo responsable, el coreano Kim Tae-gyun, quien ya dirigiera la eléctrica y muy comiquera Volcano High (2001). Parecen buenos alicientes, pero los amantes de las historias con sustancia lo tienen crudo, porque a unos personajes del grosor de un papel de fumar (sin motivaciones ni personalidad más allá de la que les aporta su cliché) se les une una trama endeble y poco explicada, que al final deja con la sensación de que no te han contado nada.
Por todo esto puede que a alguien le dé por pensar en Versus (2000) de Ryuhei Kitamura, pero Higanjima no tiene ni la gracia, ni la irreverencia, ni la falta de complejos que llevaron a la otra a la categoría de film de culto. A pesar de ello, tal vez muchos logren disfrutar de su pirotecnia durante las primeras tres cuartas parles del metraje; a partir de ahí, es otro cuento. Quienes no hayan quedado satisfechos en este punto, no harán más que confirmar sus peores presagios; los que sí, pueden acabar sintiendo que les han arruinado el visionado. El caso es cuando los efectos digitales hacen su aparición en la secuencia final (con su climática lucha contra el monstruo) inexplicablemente la calidad técnica del film cae en picado. ¿Iban los productores cortos de dinero y adquirieron un anticuado programa de creación de CGI? La cosa resulta bastante risible, y siempre queda la opción de tomárselo a cachondeo.

domingo, 17 de octubre de 2010

Sitges 2010 día 9: Viernes día 15 Octubre

¿Y muchos se preguntarán...? ¿Hizo ayer fiesta CineAsia?

Pues no, la verdad es que no, pero lo que sí que hicimos ayer viernes fue nuestra primera cena "real" del festival. (No quiere esto decir que el resto de días nos hayamos alimentado virtualmente, pero el ritmo de comida rápida ha superado la media con creces). Y ya se sabe, después de la cena viene la tertulia, las quinielas acerca de qué película se llevaría los premios, etc. Evidentemente las actualizaciones las dejamos para un rato más tarde.

Empezamos el día (fue ayer pero parece que fue ya hace mucho tiempo) con Apichatpong Weerasetakul. Recuerdo que en el mes de agosto le preguntamos a Ángel Sala que nos diera tres motivos para ir a ver Uncle Boonmee Who Recalls his Past Lifes. Nos contestaba así:

"¿Tres motivos? –Ángel sonríe de nuevo-. Es fácil. Primero porque la considero una de las cinco películas fundamentales del 2010. Segundo, porque es una de las cinco películas que cambian el cine para siempre, junto con Origen y Toy Story 3, en el presente año. Y en tercer lugar porque demuestra que Apichatpong es un genio. Primero, porque demuestra que es un gran director, entiende a la perfección el elemento cinematográfico de su idiosincrasia cultural. Y también, porque ha conseguido tomar el pelo a toda la crítica internacional: siempre acaba haciendo la película que le viene en gana, y todo el mundo dice que es un genio. Es para alabarlo. Que venga con Uncle Boonmee… a Cannes debajo del brazo y que al final acaben dándole la Palma de Oro, no es algo que se haga todos los días".

Apichatpong no es un director al uso. Su cine, tampoco. Sus películas van más allá de los patrones que rigen el lenguaje cinematográfico convencional (planteamiento, nudo y desenlace). El lenguaje que utiliza el director tailandés es más próximo al videoarte que al cine (el cine que entiende el 90% de los espectadores que van a una sala, donde me incluyo). Aún y así, y desde el conocimiento de practicamente toda su obra, y desde hace apenas unas horas, desde el plus que supone conocer al director en persona, puedo decir que "ahora entiendo un poco más su forma de encarar un proyecto cinematográfico".

Su filmografía se aproxima más al concepto de viaje, de recorrido iniciático, que al de seguir un argumento. Y como en todo viaje es importante dejarse llevar. ¿Necesario? Evidentemente. ¿Creativo? Sin duda. ¿Palma de Oro en Cannes? Yo se la hubiera dado a Poetry de Lee Chang-dong.   

viernes, 15 de octubre de 2010

The Shock Labyrinth 3D: ¿Por qué no continuaste con La Maldición, Shimizu?

De nuestro colaborador Jordi Codó

Parece indiscutible que la tecnología 3D viene (de nuevo) a reforzar un concepto de ‘cine de atracciones’ que juega con el espectador al puro impacto y la vana sorpresa. Tiene todo el sentido del mundo, entonces, que Takashi Shimizu haya decidido situar su primer proyecto en tres dimensiones en un parque de juguetes mecánicos. Lástima que este autoconsciente planteamiento se vea lastrado… por todo lo demás. Incomprensiblemente, lejos de dotar al film de una narración directa, sin tapujos ni coartadas (como la de The Grudge), que habría dado mayor brío al espectáculo, el guión se embrolla en un complicado juego de puntos de vista que termina por no aclarar la confusión creada, y que no hace sino intentar camuflar en balde su simple historia de fantasmas vengativos.

En el plano estético, se agradece el recurso a la poesía visual y la moderación de los ‘sustos’, pero a pesar de estas muestras de sofisticación el aspecto general de la imagen es ordinario, quizás por una mala adaptación (o un mal uso) de las texturas en el relieve.

Sea por lo que sea, el resultado parece más de una atracción de Futuroscope que de un certamen de cine. En definitiva, una de las mayores decepciones de festival, que sólo tendrá sentido si Shimizu aprovecha la experiencia a la hora de modelar su próximo videojuego… tal vez en 3D.
           

Sitges 2010: Día 8 (Jueves 14 de Octubre)

El jueves era un día esperado por muchos. El eco de A Serbian Film se había calado entre los espectadores meses antes del inicio del festival. La hora parecía perfecta: Las 13 horas, por aquello de que a nadie se le indigestara la proyección. Y claro está, todos los periodistas que después iban a afilar  su repertorio lingüístico para desgranar este film serbio, se dieron cita en el Auditoio del Meliá.

Haciendo un poco de barrido por la prensa digital "convencional" de nuestro país te das cuenta de este hecho. Todos han tenido algunas palabras para A Serbian Film. Para desgracia del espectador asiático, pocos han sido los medios que han hablado de The Housemaid, recordemos, película también incluida en la Sección Oficial Fantástica a Competición (a excepción de El Periódico, que le otorga el papel de favorita para los premios del certamen), y ningun medio el que ha ofrecido su versión de Cold Fish. Asia no tiene cabida para la prensa nacional, a no ser que toquemos cuestiones económicas, desastres naturales, o nos refiramos a la tensión que viven... desde hace más de 50 años las dos Coreas.

De The Housemaid de Im Sang-soo (director coreano invitado a Cannes y a San Sebastián con sus películas previas, A Good Lawyer's Wife o The President Last Bang), ofreceremos una crítica, junto con el encuentro informal que mantuvimos con su director. Crítico con el país en el que vive, del que comenta "todavía se mantiene el control de los grandes congolmerados económicos en muchos ámbitos de la vida coreana. Corea continúa siendo excesivamente clasista", Im Sang-soo se ha servido del clásico de 1967, The Housemaid (firmado por Kim Ki-young, al que se conoce como padre del cine coreano de terror contemporáneo), con el fin de darle una nueva vuelta de tuerca a la erótica del poder, y al poder de las clases en Corea. Una película sugerente, que desborda sensualidad y nos abre una mirada a lo retorcido del alma humana.

El día tuvo otras propuestas. Una más que interesante fue descubrir que Sion Sono continúa siendo uno de los directores nipones más interesantes del panorama internacional. Él como nadie es capaz de introducirse en la psique humana para analizarla. Sin ningún tipo de concesión, Cold Fish se abre con un hecho incidental que además no vemos en pantalla (el robo en unos grandes almacenes), y que desencadenará la explosión de un nucleo familiar. Hay que tener aguante para ver todo el metraje del film, pero todavía hay que tener más aguante para confirmar que lo que estamos viendo es una radiografía de la sociedad (el film está basado en hechos reales) y que nosotros formamos parte de ella.

A dos días del final del festival, las cartas todavía se mantienen sobre la mesa. Sobre todo cuando nos enteramos de que el film de Apichatpong, Uncle Boomnee Who can Recall His Past Lives, que no estaba incluído en la competición, finalmente ha optado por competir en la muestra. Confessions, 13 Assassins, The Housemaid, Bedevilled... Uncle Boonmee...





jueves, 14 de octubre de 2010

14 Blades: Cómo hacer una obra maestra

De nuestro colaborador Eduard Terrades Vicens

El wuxia pian goza de buena salud, eso es innegable. Quién no quede convencido con ello que visualice 14 Blades, una espectacular cinta de espadachines situada en la Dinastía Ming, basada en Secret Service of the Imperial Court (Tony Lo, 1984), una antigua película de la Shaw Brothers. Daniel Lee la recupera y le da una personalidad propia recuperando la esencia de este tipo de películas marciales en las que el uso de los cables convencionales sirve para desarrollar una puesta en escena coreográfica muy próxima al ballet o a la danza. Si a eso le añadimos una pizca de aventuras por la vasta región de la china desértica de antaño, unos personajes estereotipados con roles predeterminados, un romance de por medio, y un espadachín con catorce espadas en su haber, sin duda alguna, nos hallamos delante un swordsplay clásico.

Esta aventura de héroes caballerescos, que en palabras de Donnie Yen (ejerciendo el rol de protagonista principal encarnando al guardaespaldas Qing Long) luchan por preservar su dignidad, nos cuenta las trifulcas internas entre una elite de guerreros (jinyi wei) al servicio del Emperador y varios reinos conspiradores que quieren derrocar el poder de su señor mediante la falsificación del sello imperial que le otorga plena legitimidad para gobernar. Yen es el mejor luchador de esta secreta facción de agentes especiales al servicio del emperador, y a consecuencia de una emboscada preparada expresamente para que le inculpen toda la responsabilidad ante el robo del sello original, debe huir por los páramos agrestes de la China profunda al ser considerado un traidor. Gracias a un grupo de forajidos y a la ayuda de una muchacha (Wei Zhao) de la que pronto se encariña, podrá salvaguardar su nombre y evitar que el falso sello sea institucionalizado.

En definitiva, una reconstrucción fílmica de los parajes de la China de la Dinastía Ming con combates marciales que dejarán pasmados a los espectadores que más disfrutan con este tipo de productos. La peculiaridad que distancia esta película de otras con argumento similar es la artimaña que lleva consigo Yen, en la que esconde las mencionadas catorce espadas, así como otros artilugios que le permiten deslizarse burlando la ley de la gravedad. Otro elogio que al mismo tiempo resulta un alivio para el espectador es la perfecta integración de la historia en el montaje, pues el filme se sigue sin demasiados problemas (más allá del reconocimiento exhaustivo de todos los personajes) y no hay confusiones argumentales que si encontramos en productos de por ejemplo Tsui Hark (Siete Espadas sin ir más lejos, también con Donnie Yen). En este aspecto es de agradecer que la narración no sea un problema para disfrutar de las exquisitas coreografías marciales que adornan la historia como complemento esencial ante una trama de corrupción y venganzas.

14 Blades no es una obra maestra del género, pero si aporta un dinamismo que no se ve en otras producciones similares en las que el tedio se impone a la media hora de metraje. Por lo tanto, y aunque sea un blockbuster para amasar dinero a base de las tortas impuestas a golpe de espada, su buena lógica interna nos hace pensar que sus responsables han querido ir más allá del simple entretenimiento. Tal vez a finales de año podremos revalorarla y otorgarle el distintivo de mejor wuxia del 2010.

Dream Home: ¿quién dijo que Saw es sádica?

De nuestro colaborador Óscar Sueiro

No suelo poner sinopsis en mis reseñas porque esa información ya está en la web del festival, pero si haré un mini-resumen para que os hagáis un idea: una mujer con una vida bastante triste se obsesiona con un piso con vistas al mar. Además de los contratiempos económicos se interpondrán otras "cosas" en su camino, "cosas" que ella eliminará de forma original, despiadada y gore hasta conseguir su sueño.

Lo que más que cuesta de asimilar en esta historia es que está basada en hechos reales (aquí nos viene muy bien eso de que la realidad supera la ficción), y quiero creer que lo han hiperbolizado al máximo, que no fue así de truculento, ya que los crímenes que comente la protagonista harían retroceder al mismísimo Jason Voorhees. Y ahí radica la diversión. Casi todos los asesinatos tienen el ingenio como aliado, y el modo tan explícito de retratarlo hace las delícias de los amantes del gore, que luce unos efectos de maquillaje impecables.

Pang Ho-Cheung nos cuenta los hechos saltando hacia atrás en el tiempo con flashbacks costumbristas, y saltando hacia delante para dejar evolucionar el enredo homicida, supongo que para dejarnos respirar entre muerte y muerte, y para disimular lo lineal y básica que es la narración en sí. Pero la verdad es que consigue mantener nuestra atención todo el tiempo y hacer que los golpes duelan. La actriz principial, que lleva el poco peso interpretativo del film también está de miedo (nunca mejor dicho), y el tono ambiguo del relato -drama costumbrista o broma macabra (lo de la broma lo entenderéis mejor cuando veais lo que pasa en el piso de los jóvenes)-, le confiere un equilibrio muy curioso.

Sin ser una gran película, puede considerarse de todas formas, imprescindible para los aficionados al género.

Bodyguards and Assassins: el arte en pantalla grande

De nuestro colaborador Eduard Terrades


La última sensación proveniente de esa magnifico oasis capitalista de la china comunista es Bodyguard and Assassins, un blockbuster crítico con el asedio político practicado por el gobierno de la República Popular de China desde los tiempos en que los británicos incautaron la zona de Hong Kong, que ningún historiador de cine debería perderse. Y menos aún cualquier aficionado al cine de acción asiático.

Año 1901. Primer asesinato político de Hong Kong. En 1905, Sun Wen, un revolucionario exiliado, emprende acciones desde el núcleo de la resistencia en pleno centro de Hong Kong. Varias familias chinas exiliadas le siguen la corriente e intentan promover una revolución que termine con las ansias imperialistas del Emperador, con la utopía de construir la Primera República Democrática China. Varios espías del gobierno de Pequín se infiltran en las calles del ya por entonces bullicioso Hong Kong, ante la pasiva mirada de los gobernadores británicos. Su objetivo: asesinar a Sun Wen. Pero no les resultará tan sencillo penetrar en el corazón del grupo revolucionario, pues estos cuentan entre sus filas con expertos luchadores de kung-fu. A grandes rasgos este es el argumento de esta superproducción rodada por Teddy Chan, partiendo en todo momento de unos hechos históricos y de unos personajes que en verdad existieron. Un relato que se expande con fuerza en sus más de dos horas de metraje, equilibrado y estructurado en dos partes muy diferenciadas: mientras que en la primera hora asistimos a las confabulaciones de ambos bandos y a la presentación de todos los personajes relevantes, en la segunda hora presenciamos los diferentes enfrentamientos para salvaguardar la integridad física del líder revolucionario.

Ante todo, Bodyguard and Assassins es una película histórica, que se aprovecha de esos acontecimientos políticos y sociales de la época para evolucionar hacía un tipo de cine negro en el que el espionaje y las alianzas familiares desempeñan un factor fundamental para el desarrollo de la trama. Puede que ese hermetismo histórico frene a esos espectadores indecisos, pero seguro que su opinión cambia si les decimos que Donnie Yen interviene en ella para aportar su granito de arena marcial que reactiva la acción en esas secuencias necesarias para no aburrir al neófito que desconozca las coordenadas del cine de Hong Kong. Son pequeños enfrentamientos secundarios algo violentos que aportan la ración habitual de artes marciales tan idiosincrásica del cine de la ex-colonia británica. Son pugnas que aportan coherencia a la historia y al título del filme. No son muy realistas, pero si espectaculares y de una contundencia extrema en según que escenas.

Otras virtudes ha destacar son esas explosiones tan bien filmadas, persecuciones muy cinematográficas (la última de todas imitando la bajada de las escaleras de El Acorazado Potemkin), extremo perfeccionamiento técnico en las escenas de acción, una cuidada recreación del Hong Kong de principios del siglo XX, (excelente diseño artístico) y una tardía reivindicación de los principios democráticos en un territorio en el que por ley seguirá prevaliendo el régimen capitalista hasta el año 2046. Y es que seguramente al gobierno chino no le debe haber sentado muy bien que esta producción se haya convertido en la película más taquillera de Hong Kong y Macau durante dos meses consecutivos, y que encima consiguiese hasta ocho premios en los Hong Kong Film Awards 2010. Pero ya se sabe que este reducto territorial del capitalismo desenfrenado sigue buscando sus libertades individuales como esos personajes que en su día fueron considerados unos terroristas y que un siglo después son recreados como unos auténticos héroes cotidianos revolucionarios. La historia no se ha deformado, sigue siendo la misma, pero la percepción que se tiene de ella varía en función de quien la cuenta, y precisamente Teddy Chan juega con esta ambigüedad sin perder ni un solo ápice de ritmo y de lo que podríamos definir como cine comercial de autor. 

Zebraman 2: Miike se supera a sí mismo

De nuestro colaborador Eduard Terrades


Takashi Miike suele rodar sus secuelas sin tener en cuenta las primeras partes, y vuelve a demostrarlo en esta interesante continuación de Zebraman, de cuya fuente original sólo recupera el decrépito superhéroe que sigue interpretando Show Aikawa. Y del mismo modo que en D.O.A. 2 se teñía el pelo de rubio, para esta ocasión le ha tocado ponerse de pollo platino. Una anécdota que sirve para readaptar la estética y el traje de combate de Zebraman, y cuya participación activa como héroe nacional supera con creces con respecto al primer filme.

Esta secuela, que para nada respeta la original, se enmarca dentro de los parámetros del cine fantástico, desmarcándose de la comedia social que pretendía ser la primera parte. El argumento es lo de menos, ya que no tiene demasiado sentido en su conjunto, pero se podría resumir en: año 2025, la ciudad de Tôkyô es invadida por Zebra Queen (Riisa Naka), una cantante pop que se erige como líder de la megalópolis, instaurando un régimen dictatorial y, por razones que no vienen a cuento, su mente está conectada con Zebraman, que en esos momentos vive amnésico fuera de la ciudad acogido por las fuerzas de la resistencia. Poco a poco irá despertando de su letargo y establecerá contacto con la reina de las zebras tokiotas, descubriendo que su existencia es fruto de la energía negativa que emanó de su cuerpo en el momento que fue convertido en superhéroe por un científico chiflado.

Todo lo demás son puras idas de olla a las que ya nos tiene acostumbrados Miike, pero si algo se diferencia con la primera parte, es que por lo menos ésta cinta es entretenida, dinámica y contiene algunas ocurrencias visuales que solo podían surgir de la mente de este hiperbólico director. La primera Zebraman llegaba a extasiar en algunos momentos, y por ese motivo Miike ha optado por conglomerar muchas de sus ideas locas en una sola película que no puede considerarse un blockbuster, pero si una digna sucesora de Yatterman. Hay fragmentos que son un calco de esa adaptación que hizo hace poco más de un año sobre una serie famosa de robots de la productora Tatsunoko, pero también es evidente las influencias de D.O.A Final o de esas texturas visuales extraídas de los mundos sintéticos de Mamoru Oshii. Sin olvidar la marcialidad brutal practicada por la policía de Tokyo Gore Police (en esta ocasión por unas fuerzas del orden disfrazados con unas caretas de cebra), pero sin llegar a la violencia sanguinaria de la cinta de Nishimura, o las parodias de las series tokusatsu, con un Zebraman televisivo que ayuda al verdadero superhéroe a ritmo de las canciones del legendario Hironobu Kageyama (un cantante especializado en series de superhéroes enmascarados).

Consecuentemente pues, Zebraman 2: Attack on Zebra City supera a la original con buena nota, con una banda sonora de fanfarria pomposidad orquestal, y con un Show Aikawa delirante que se vuelve a poner en la piel de esa cebra enmascarada para goce de los seguidores de este peculiar superhéroe a rallas.

Legend of the Fist: La leyenda de Donnie Yen

De nuestro colaborador Óscar Sueiro

Los amantes del cine de artes marciales hemos pasado por admirar a diferentes estrellas según la temporada de nuestra vida; Bruce Lee, Jackie Chan, Samo Hung, Jet Li, etc. Pero ahora, y aunque ya lleve unos años en ello, es el turno de Donnie Yen. No es esta película la que lo confirma, si no Ip Man, proyectada en la pasada edición del Festival, pero a Legend of the Fist no le faltan secuencias maestras de artes marciales, tanto en la interpretación como en el diseño de las coreografías, también a cargo de nuestro protagonista.

Recuerdo con mucho cariño ir al videoclub y alquilar todas las películas de kung-fu que hubiera a mi alcance, y también me parecía muy inteligente la forma en que se hacían; dar lo que su público quiere. Peleas, casi siempre bajo el pretexto de la venganza por asesinato del maestro o de un compañero.
Nada más, sin complicaciones, podía haber un traidor que se uniera al clan enemigo, pero básicamente eran excusas para luchar. Todo esto viene a que en el film que nos ocupa quieren ir un poco más allá, y las tramas implican enemistades político-militares, espionaje, algo deromance, y todo ello hecho a lo grande, con un envoltorio/dirección artística apabullante que deriva en un exceso de duración y en nuestra
impaciencia como espectadores que queremos que Donnie deje de hablar y empiece a repartir. Más cuando ya nos han puesto la miel en los labios empezando la historia con una secuencia de acción para levantarse de la silla y aplaudir (de hecho, así ha sido). Menos mal que luego nos han ido regalando algunas proezas marciales más.

No puedo dejar de citar a Andrew Lau, ya con bastante oficio dentro del género, especialmente por The Storm Riders y A Man called Hero, ambas exitosas y también rodadas con muchos medios. Quizás también con el defectillo de fábrica de Lau, que no sabe meter tijera en la sala de montaje ni dosificar bien el buen material que ha rodado. Pero a pesar de todo voy a terminar con un axioma: hay que ver todas las películas de Donnie Yen.

Sitges 2010: Día 7 (Miércoles 13 de Octubre)

Parece mentira pero llevamos ya una semana de festival.

Una semana donde se han sucedido películas, anécdotas, colas frente a las taquillas de prensa, tertulias en las terraza de los bares de Sitges. Si tuviera que quedarme con alguna de todas las vivencias acontecidas, sin duda optaría por dos: una porque la viví en primera persona, y la otra por lo mucho que me han hablado de ella.

La primera tuvo lugar el pasado sábado, tras la proyección de Confessions (una de las películas más valoradas de la Seccion Oficial). Para mi desgracia su pase coincidió con la Zombie Walk con lo que no pude ir a verla, ya que tuve que hacer "guardia" en el stand (espero poder vela nada más terminar el festival). Conocía dos de las películas previas del director, Kamikaze Girls y Memories of Matsuko, y las expectativas eran muy altas. Estas se cumplieron: todos hablan maravillas de la película. Lo que sucedió, esa anécdota propia de un festival fantástico, aconteció unas horas más tarde, cuando tuve la suerte de conocer a Tetsuya Nakayima (director de Confessions) y a su mujer. Aquello que se suele decir "Si la montaña no va a Mahoma...," se cunmplió, al presentarse frnte al stand de CineAsia tanto el director como su mujer. Esa pequeña conversación mantenida con ellos, en un claro homenaje a Lost in Traslation, fue suficiente para compensar el no poder ver su película.

La segunda de las anécdotas tiene que ver, como no, con Yoshihro Nishimura y su master class. Para los que tuvieron la oportunidad de asistir, imagino que todo lo que pueda decir se les quedará corto. Hubiera sido interesante ver por allí a un sin número de críticos "ausentes".  Pero claro, eso es otra historia. La sesión nofue muy concurrida. Una compañera de CineAsia, junto con un especialista de Asiateca, estuvieron allí, para ser testigos de una de esas lecciones magistrales con las que el festival está acercando a público y realizadores en los últimos años. Durante la clase, al ritmo de las preguntas, Nishimura fue maquillando a una joven del púbico, para que los asistentes fueran testigos de su "modus operandi" a la hora de crear efectos especiales. Impagable.

Para acabar, comentar que hoy miércoles pude asistir al homenaje que Derek Kwok  realiza a la Shaw Brothers y a las películas de artes marciales. Gallance es toda una sorpresa, y un privilegio de poder ver en una pantalla grande.